Atleta Paralímpica japonesa Maegawa escribe libro infantil sobre vida con prótesis
Kaede Maegawa, que compitió en Juegos Paralímpicos Río 2016 y Tokio 2020, escribió año pasado un libro sobre un perro negro con una pierna protésica 09 Nov 2022
Si se hojea un libro infantil de color amarillo escrito e ilustrado por la atleta Paralímpica japonesa Kaede Maegawa, se verá la rutina matutina de un simpático perro negro con una pata protésica.
El perro se despierta, salta al baño y se pone la pata protésica antes de cambiarse de ropa y desayunar, de forma similar a como Maegawa, de 24 años, empieza un día cualquiera.
Maegawa, que compitió en salto en largo femenino y 100m T63 en los Juegos Río 2016 y Tokio 2020, hizo dibujos e ideó las palabras del libro durante los campamentos de entrenamiento previos a los Juegos Paralímpicos del año pasado. Espera familiarizar a los niños con lo que supone tener una pierna protésica.
Desde que el libro "Qoo-chan Itterasshai (Que tengas un buen día, Qoo-chan)" se publicó a finales del año pasado en Japón, se ha sorprendido de la respuesta que está obteniendo.
El cuento sigue a Qoo-chan, un perro negro inspirado en el Labrador Retriever de Maegawa que ella paseaba cuando tuvo un accidente en 2012.
"Quería compartir las cosas cotidianas de la vida. Quiero que los lectores piensen en lo que supone tener una pierna protésica y en lo diferente que puede ser", dijo. "También espero que el libro anime a los niños con prótesis a dar un paso adelante".
Como llevar gafas
Maegawa dijo que siempre había querido escribir un libro ilustrado. Pero se inspiró para escribir sobre prótesis después de ver al hijo del tres veces medallista Paralímpico Atsushi Yamamoto a principios de 2021.
El hijo de Yamamoto, que entonces tenía tres años, intentó aflojar un tornillo de la pierna protésica de su padre y probársela él mismo, copiando lo que el atleta hace cada día.
"Me hizo darme cuenta de que, para el niño (de Yamamoto), que su padre lleve prótesis es lo mismo que para otros niños que tienen padres que llevan gafas. Pensé en lo increíble que sería que los niños pudieran familiarizarse con las prótesis desde una edad muy temprana", dijo Maegawa.
Y a partir de ahí, todo fue muy rápido. Encontró un editor y realizó dibujos en su tablet mientras se preparaba para los Juegos Tokio 2020.
"Fue justo antes de los Juegos Paralímpicos, pero dibujaba en mis días libres o entre los entrenamientos", recuerda. "Quería hacer algo que pudiera ser fácilmente entendido incluso por los niños que aún no conocen muchas palabras".
Animando a los niños
El libro de Maegawa ha estado en las estanterías de las librerías de Japón y también se distribuyó en las escuelas y guarderías locales de Mie, una ciudad de su prefectura natal.
Aunque esto es un logro en sí mismo, está especialmente orgullosa de un mensaje que recibió de la madre de un niño con una prótesis en la pierna. El niño tenía problemas para encajar con otros niños en la escuela y no participaba en la clase de educación física, porque no sabía cómo decirle a su profesor que realmente quería estar en clase.
"Un día, el niño llevó mi libro a la escuela y dijo a los demás alumnos: "el personaje es como yo". Eso le dio mucha energía, y pudo decirle a su profesor que quería estar en la clase de educación física porque hay cosas que puede hacer", dijo Maegawa.
Como su primer libro fue un éxito, ahora está trabajando en la secuela.
En un libro, el perro negro va a la playa, porque a Maegawa le han preguntado los niños cómo nadan los amputados en las piernas. En otro libro, Qoo-chan aprenderá a correr con la ayuda de personajes inspirados en los atletas Paralímpicos japoneses.
La historia de Maegawa
Aunque el libro del perrito está inspirado en su propia experiencia, ¿cómo ha sido la historia de Maegawa?
Maegawa, que estaba en el primer año de secundaria cuando sufrió el accidente, dijo que tardó un año en conseguir su primera prótesis de pierna. Aunque llevar una pierna protésica le produce dolor a veces, Maegawa dice que siempre le ha gustado cómo le queda.
"Me gusta mucho mi pierna protésica. Me gusta su aspecto mecánico. Cuando me la probé por primera vez, pensé en lo bien que quedaba", dijo. "Al principio no me gustaba que la gente se quedara mirando mi pierna. Pero como la gente se quedará mirando pase lo que pase, ahora intento que parezca algo realmente genial y a la moda".
Sin embargo, Maegawa dijo que correr con una pierna protésica es una cuestión diferente. Después de haber jugado al baloncesto, no le gustaba tener que quedarse fuera de las clases de educación física en la secundaria y se propuso poder volver a correr.
"Estuve viendo los Juegos Paralímpicos de Londres (en 2012) en mi habitación del hospital, así que supe que era posible que corriera", recuerda. "Pero aunque quieras correr, es muy difícil saber por dónde empezar. Tuve la suerte de tener un entorno que me apoyaba mucho".
Se unió a un club local de corredores y se probó las cuchillas de otras personas y aprendió de otros amputados. Tardó unos seis meses en poder correr y finalmente debutó en el campeonato mundial en 2015.
La historia continúa
Tras quedar fuera del podio tanto en los Juegos de Río como en los de Tokio, Maegawa está decidida a ganar una medalla en París 2024.
Para ello, se fue a Italia durante dos meses este año para entrenar y pasar tiempo con Martina Caironi, dos veces campeona Paralímpica y plusmarquista mundial de los 100m femeninos y de salto en largo en la clasificación T63 de Maegawa.
"Pude entrenar con Martina, y también vi cómo pasa el tiempo fuera del deporte. El tiempo que pasé en Italia tuvo un gran impacto en mí: me hice amiga de Martina y también aprendí mucho sobre mí misma", añadió.
A menos de dos años de los próximos Juegos Paralímpicos, Maegawa dijo: "Quiero dar mi cien por cien y pasar cada minuto, cada segundo sin lamentarme".